Exposicion

Ariel:

Sorpresa es lo que nos depara un investigador inquieto como Ariel: su pesquisa en pintura con intenciones hacia el mural, nos presenta ahora toda una imaginería de pequeño formato, donde el relieve, el color y el espacio, se alternan en soluciones de creatividad y expresión.
Sorpresa de un dibujo que estructura figuras y relaciones espaciales; de una materia renovada, audaz y sensible; de una espontaneidad que renueva los signos, los contrasta y los armoniza.
Puso en juego una imaginación desbordante en rincones de intimidad que convidan a una lectura lenta de descubrimientos formales, llenos de emoción: fué capaz de crear su poética sin olvidar los valores plásticos.
Una exposición que se adapta al tamaño de nuestra Sala M.A. Pareja.


Peciar
ARTES PLÁSTICAS

> Escultura y pintura de Ariel Sánchez. En la sala Miguel Ángel Pareja del IENBA (Martí 3328), hasta mañana viernes. Recorriendo una zona en la que no se puede distinguir en términos absolutos pintura de escultura, la propuesta de Ariel Sánchez ofrece una riqueza imaginativa, plástica y expresiva de sorprendente singularidad. Se trata de pequeñas esculturas o “grupos escultóricos” realizados con maderas desechadas y otros materiales en desuso; cada una de estas obras recrea un momento, una anécdota o un episodio muy simple pero cargado de detalles que así y todo siempre conforman totalidades armónicas y de gran integración plástica. La distribución espacial, el tratamiento el color y las diferentes texturas le dan a las construcciones escultóricas un aire peculiarmente “pictórico”. El otro efecto de sus combinaciones es el encanto expresivo que logra con estos objetos que nos colocan dentro de un universo próximo al de los niños y sus espontáneas creaciones. Los cuadros que conforman esta muestra son relieves construidos con diferentes tipos de papeles, cartones y otros elementos, adoptan la forma de “cajas” remedando pequeños retablos ricos en detalles y sorprendentes combinaciones. Para uno de ellos, por ejemplo, utiliza como fondo un “taco” entintado de madera que sirvió antes para realizar grabados; otros construyen desde una sencillez solemne figuras como la de un “caballo” con solamente dos palillos de ropa. El resultado es que el espacio de la sala Miguel Ángel Pareja aparece poblado de pájaros, animales y figuras humanas, conformando escenas bucólicas o de fábula conmovedoras mediante un lenguaje muy personal: el estilo de Sánchez no se parece a ningún otro que podamos evocar inmediatamente. Porque aunque se podría establecer una asociación inmediata con las esculturas del excelente JJ Núñez, por la utilización de materiales como maderas en desuso tal cual se encontraron, como también por el color y la referencia al mundo animal, se trata de una similitud sólo abstracta: los estilos son definidamente diferentes. En otro plano, se le podría vincular con aquellos artistas “nórdicos” que a mediados del siglo pasado formaron el grupo Cobra y que defendían en los términos de Asger Jorn (uno de sus fundadores) además de la “inexistencia de la distinción absoluta entre pintura y escultura la legitimidad del “papel de lija y el algodón” como medios de expresión tan nobles y tan utilizables como lo son la pintura al óleo y el mármol. Próximos al arte infantil, al arte primitivo o al llamado “art brut”, el objetivo teórico del grupo era reinstaurar en una cultura anónima pero auténtica el arte como lo estaba en su origen, sobre la base de los sentidos. Las desmesuradas manos de muchas de las figuras humanas de Sánchez, con dedos como picos, nos hacen pensar en el “grito de libertad” de Karel Appel, fundador junto con Jorn del grupo Cobra. Ariel Sánchez tiene 39 años y egresó de la Escuela Nacional de Bellas Artes en 1993 donde se desempeña como docente del área del Plano en el Espacio. También integra en la actualidad un grupo de docentes, estudiantes y egresados de la Escuela que desde hace cuatro años trabaja, investiga y difunde la pintura mural en diferentes zonas de Montevideo y el interior (www.movimientomuralista.blogspot.com). Con una gran capacidad de trabajo, un interés incansable en la investigación y un indiscutible talento, se trata sin duda de un valioso artista que vale la pena tener en cuenta de aquí en más.

Inés Moreno
6 de setiembre 2007 - MONTEVIDEO URUGUAY